Sistema de Transformación Familiar

Un sistema basado en herramientas y hábitos, en donde cada miembro de la familia trabaja en si mismo para que el hogar se transforme en un entorno de crecimiento, apoyo, equilibrio y mejore la calidad de vida de sus miembros.

Cuando cada miembro de la familia equilibra su mente, cuerpo y energía, la familia entera se transforma.

El Sistema de Transformación familiar (STF) plantea un enfoque integral para el bienestar familiar que une el crecimiento personal, la educación emocional y las experiencias compartidas para ayudar a las familias a mejorar la relación padre e hijo y crear un contexto de evolución, empatía, amor y respeto, para juntos evolucionar y vivir una vida plena y en equilibrio.

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“Un niño puede enseñar tres cosas a un adulto: a ponerse contento sin motivo, a estar siempre ocupado con algo y a saber exigir con todas sus fuerzas aquello que desea.” Paulo Cohelo

Problemáticas que Abordamos

No nos centramos en un único elemento, trabajamos sobre todas las partes del núcleo familiar. Y, además, en cada persona, buscamos ayudar a equilibrar la mente, el cuerpo y la energía, para que todo funcione cómo un engranaje que une todas sus piezas y hace funcionar una máquina. Cuando una persona se equilibra a sí misma, deja de reaccionar de forma desalineada ante los problemas que surgen en el día a día.

En Niños (6–12 años)

En la infancia el niño está creando su identidad. Por norma general, siempre hay niños con exceso de energía, falta de atención y problemas de conducta en el hogar y en el colegio. El niño necesita ser reconocido, valorado y apoyado, pero también necesita tener unos límites claros y bien definidos, así como unas “metas” o “desafíos” que debe cumplir para conseguir lo que quiere. Los principales problemas que hemos detectado, y que vamos a trabajar en el STF son:

• Falta de autoestima.
  

• Gestión emocional inmadura.
  

• Dependencia excesiva de pantallas.
  

• Hiperactivación, irritabilidad o bloqueo.
  

• Problemas para expresar lo que sienten.
  

En Adolescentes (13–17 años)

La adolescencia es una etapa de rebeldía. El ser humano (por naturaleza) experimenta una gran transformación en esta etapa. El entorno durante este proceso es lo más importante, ya que nuestra necesidad de pertenencia aumenta, y de ahí derivan muchos problemas de conducta, porque en el entorno se normaliza ese comportamiento. Durante la adolescencia no vemos el peligro, queremos llamar la atención y empieza a florecer nuestro instinto sexual. Buscamos aprobación en el sexo opuesto (según inclinación sexual) y tenemos conductas que nos aislan de lo que nos duele o lo que no nos gusta. Controlar a un adolescente es imposible, pero guiarle mediante el ejemplo, el trato cómo igual y el reconocimiento, puede beneficiar mucho el proceso. Las principales problemáticas de los adolescentes son:

• Conductas autodestructivas o de riesgo (adicciones)
  

• Apatía, falta de objetivos y desmotivación.
  

• Abuso de redes sociales, pornografía o videojuegos.
  

• Mentiras recurrentes, aislamiento y conflictos.

• Desregulación emocional, impulsividad y vacío interno.
  
  

En Padres

La mayoría de padres, una vez tienen hijos, dejan de darse el tiempo y el espacio necesario para estar equilibrados. La conciliación laboral y familiar es todo un desafío. Trabajo, comidas, ropa, compra, facturas, cuidado del niño, del hogar…La vida de un padre está llena de responsabilidades. Pero para afrontar ese estilo de vida, hace falta ponerse a uno mismo cómo el centro, ya que es un pilar. Si el pilar se desmorona, todo se desmorona. Por eso el trabajo interior de los padres es fundamental en este proceso. El equilibrio en su cuerpo, su mente y su energía es imprescindible para proporcionar una atención de calidad a su hijo y todas las áreas de su vida. La mayoría de padres tienen problemas en:

• Agotamiento emocional, confusión y exceso de responsabilidades.
  

• Comunicación rota con el hijo.
  

• Dificultad para poner límites sin generar rechazo.
  

• Dudas, culpa y miedo constante al futuro del menor.

• Falta de herramientas para acompañar.
  

Servicios Principales

Coaching infantil y adolescente (40 días)

Un programa de acompañamiento personal, para trabajar todos los aspectos nombrados a través de un sistema de pregunta/respuesta, donde planteamos retos semanales a cumplir, buscando posicionar al sujeto cómo el principal actor del cambio en su vida, y fomentando su autoconocimiento y autonomía.

Incluye:

• Diagnóstico inicial (50€)
  
  
  

• 5 sesiones. (250€)
  
  

• Diario emocional. (45€)
  
  

Valor: 345€ Precio: 250€

Acompañamiento para Padres (90 días)

Un espacio para comprender, sanar y transformar la forma en que guían y se relacionan con sus hijos. Se realiza de forma grupal, y aquí trabajaremos sobre el origen de los problemas. Bajamos a lo más profundo del subconsciente para poder traer a la luz aquellos bloqueos que nos fuerzan a reaccionar a las situaciones de determinada forma, y a crear herramientas para cambiar ese proceso.

Incluye:

• 1 sesión cada dos semanas. (385€)
  
  

• Plan de sistema de recompensas. (50€)
  
  

• Ritual de conexión familiar. (35€)
  
  

• Audio de reprogramación. (90€)
  
  

Valor: 560€ Precio: 300€

Proceso especializado de 90 días que trabaja individualmente sobre cada sujeto, sobre reuniones familiares y en actividades de unión con otras familias que estén en el proceso.

El STF completo incluye:

Incluye:

• Sesiones 1:1 (padres por un lado, hijo por otro) (1200€)
  
  

• Sesiones conjuntas (300€)
  
  

• 3 excursiones con otras familias que se encuentren en el proceso (150€)
  

Valor: 1650€ Precio: 1000€

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“La familia no es algo importante, lo es todo.” Michael J. Fox